Pese a la tendencia popular de que no se debe podar en verano, es aconsejable hacerlo si quieres que tus plantas mantengan la frescura y los colores que les caracterizan.
En este artículo vamos a hacerte una serie de recomendaciones para que sepas cuándo podar tus plantas, cómo debes hacerlo y qué tipo de plantas debes podar en estas fechas, pues no todas las variedades se deben podar en temporada estival.
Como siempre incidimos, este artículo reúne una serie de recomendaciones que nada tiene que ver que debáis seguirlas al pie de la letra y con cualquier variedad vegetal. Al igual que en anteriores artículos, os recomendamos consultar a un profesional de la jardinería para que evalúe tu situación particular y tus necesidades.
¿Por qué debes podar en verano?
El objetivo de podar durante el verano es ganar fortalecimiento y vigorosidad en tus plantas, ya que mediante la poda eliminamos todas aquellas ramas y tallos mal formados o excesivamente fuertes, que roban sabia al resto de la planta y evitan que alcance su máximo esplendor.
Si realizamos los cortes necesarios, y eliminamos todo el follaje innecesario de nuestras plantas, conseguiremos que nuestras flores y plantas continúen con su desarrollo y floración veraniega. Debemos evitar despuntes y cortes mal dados, ya que pueden aflorar en ellos plagas que afecten el crecimiento y floración de nuestras plantas.
Para ello, debemos comprobar siempre que nuestro equipo está a punto, para realizar todo este trabajo en perfectas condiciones. Desinfectar todo el material que vayas a utilizar, límpialo y afila todas tus herramientas.
Ante cualquier problema, contacta con tu jardinero de confianza o con un servicio de jardinería de calidad, que cicatrice las heridas perjudiciales para tus árboles, plantas o arbustos.
¿Cuándo debes realizar la poda veraniega?
Si dispones de todo el material, lo has preparado y te has decidido a realizar tu propia poda, debes saber que, para este tipo de podas, el periodo ideal para realizarlo comprende desde mediados de julio a mediados de septiembre.
Todo depende de la especie de planta, arbusto o árbol que vayamos a podar, cada especie es un mundo y debemos seguir los consejos de los expertos, es la única manera de que no metamos la pata y comentamos errores irreparables para la vigorosidad de nuestros jardines y terrazas.
¿Qué plantas puedes podar durante el verano?
Cómo venimos comentando, todo dependerá del tipo de plantas que quieras podar durante la temporada estival. En esta lista vamos a comentar algunas de las especies que es recomendable podar en verano, siendo este dato muy importante para no equivocarnos y perjudicar el rendimiento de nuestras especies vegetales que no debieran ser podadas en esta época.
Rosales
En verano los rosales ya han tenido un período extenso de floración, por lo que en esta época sueles estar más débiles. Una recomendación para podar los rosales en verano es eliminar los chupones, recortar los brotes excesivamente largos a la mitad de su longitud, así como todas las flores secas. El ciclo natura de las flores es fructificar, pero esto roba mucha fuerza a la planta y limita posteriores floraciones.
Además, hay que aprovechar para podar los brotes marchitos que ya se hayan secado, de manera que le aportemos mayor fuerza a los nuevos brotes y permitiendo a la planta concentrar su fuerza en la floración de nuevas rosas.
Conviene hacer la poda a principios de verano, en el mes de junio, de manera que tengamos tiempo para que florezcan de nuevo, también debéis tener en cuenta el abono, la contención de plagas y el riego para conseguir los mejores resultados posibles.
Arbustos y Enredaderas
Este tipo de plantas crecen con gran rapidez y de una manera desordenada, por mucho que intentemos contenerlas, por lo debemos eliminar todos aquellos brotes que se hayan secado o desubicado de la forma original que queremos obtener. De esta manera potenciamos su crecimiento y conseguiremos que las ramas y tallos más ocultos por el follaje perciban la luz de forma más directa.
Si empezamos con los arbustos, debemos establecer ciertas diferencias según los periodos de floración, por lo que tendremos que tenerlo en cuenta para evitar cortes que perjudiquen la floración y el crecimiento de los mismos.
A un lado, los arbustos ornamentales necesitan pequeñas podas de simple mantenimiento. De esta manera conseguiremos otorgarles la forma deseada. Respecto a los arbustos de floración primaveral tendremos que tener mucho cuidado. Ahora es el momento en el que encontramos las yemas alojadas en las ramas, es decir, los nuevos brotes que florecerán en la próxima temporada, por lo que, si los podamos durante este periodo, estaremos acabando con la floración de la próxima primavera.
En el caso de las plantas trepadoras como la Glicina, la Hiedra o el Jazmín, es el momento en el que encontraremos más tallos y ramas que rompan la estructura que queremos dar a nuestra planta, por lo que es el momento perfecto para cortar todo lo que consideremos que se sale de la línea estructural que queramos otorgarle.
Si ya tenemos la forma que deseamos, tendremos que realizar el trabajo de poda para evitar que expanda su volumen por encima de nuestras necesidades. Si, por el contrario, queremos aprovechar esta época de crecimiento, lo ideal es que guiemos los tallos por las zonas en donde queremos que crezca. Todo dependerá de nuestras necesidades y posibilidades de espacio.
Árboles Frutales
A diferencia de creencia popular, los árboles frutales se pueden podar durante todo el año, aunque el objetivo y la intensidad son diferentes según el momento. Existe una primera poda que sería en primavera (entre los meses de abril y mayo), pero en este post nos centraremos exclusivamente en la realizada en verano o también denominada, tardía.
La segunda poda de los árboles frutales comprende desde agosto hasta finales del mes de septiembre. Durante esta etapa se realizan podas suaves, eliminando las ramas y brotes débiles, mal formados o que crecen en competencia con otros y marcando las guías para la floración de los nuevos brotes. De esta manera conseguimos airear mejor el follaje central y mejoramos la iluminación de la parte central, concentrando la llegada de nutrientes a las yemas que nos interesan.
Para podar en el momento adecuado, debemos entender y conocer las características de la planta, así como dónde está ubicada y las condiciones meteorológicas que precisa para su correcto crecimiento.
Solo de esta manera conseguiremos comprender los detalles de su crecimiento y el momento adecuado para realizar los trabajos de poda y mantenimiento de la planta. Por todo ello, ante cualquier duda que pueda surgirte, consulta con nuestros especialistas en jardinería, que estarán encantados de atenderte.
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